Ilusión

No sé si celebrar la Navidad tiene algún sentido. Si la mezcla de religión con fiesta es una buena mezcla. Pero sí sé que si en la familia hay niños, vale la pena. Ver esas caras de ilusión, esperando que Papá Noel toque el timbre o que lleguen los Reyes Magos por el balcón merece esperar un año. El ruido del papel al abrir un paquete, la desesperación por ver si es lo que quieren o si ha lugar a la sorpresa…La Nochebuena me gusta porque con Ángela y Álvaro, mis sobrinos, aún nos quedan imágenes como éstas.